Archive of Our Own ^beta

Chapter Text

En los pasillos de la academia Edén un pequeño niño de cabello verde y desordenado caminaba mientras arrastraba los pies, estaba algo cansado por toda la rutina escolar además se estaba recuperando de un resfriado que le había dado por acompañar a cierta mocosa molesta de pelo rosado, no obstante, cuando observo hacia el patio principal de la escuela observo a esa chica y no estaba sola por lo que intento caminar más rápido.

Anya-chi, vamos a los bolos el fin de semana—comento Freddy emocionado—ira la mayoría de mi salón

No gatita, mejor vamos a comer—Tertius la miro con una sonrisa soberbia en sus labios—quiero aprender todo sobre tu país

Anya estaba algo abrumada ya que ella solo quería llegar a su casa para poder ver el maratón de dos días de Spy Wars, pero no quería ser grosera con esos dos niños que se habían vuelto sus amigos ya que cuando le comento a su padre sobre sus nuevas conexiones este parecía muy feliz de tener más información de ese pequeño país donde el rubio de peinado raro era príncipe y también quería la información de la familia que era socia de los Blackbell.

Oye piernas cortas—una voz conocida se acercó a ellos

Segundo—la chica lo observo con un deje de emoción ya que siempre la salvaba cuando esos dos chicos estaban insistentes con ella

Te—la miro a los ojos y sintió como su corazón estaba latiendo con tanta fuerza que se le olvido como iba a apartarla de esos dos fastidiosos—bueno, me

Maldición, no sé qué decirle para quitarle a esos dos chicos

La pelirrosada se sorprendió ante ese pensamiento, pero creyó que era porque quería ayudarla a escapar porque eran amigos, así que recordó algo que le dijo Becky.

¿Me ibas a ayudar a estudiar? —fingió una voz más inocente—gracias, eres mi héroe—lo tomo del brazo

Damián tuvo que ahogar el grito de nervios que tenía al sentir esa cercanía, además el sonrojo marcado en sus mejillas lo quería delatar, pero ya ella había creado la mejor forma de deshacerse de los chicos que los miraban con curiosidad

Si—musito—vamos a la biblioteca

Nos vemos chicos—alzo la mano—adiós

Los dos niños alzaron sus hombros y decidieron caminar hacia la salida, mientras que Anya y Damián se escondían en un arbusto cercano para evitar caminar hacia la biblioteca ya que luego sería cansado regresar, pero Damián se sentía demasiado nervioso ya que Anya aun no soltaba el agarre de su brazo.

Oye—intento llamarla

Guarda silencio—con su mano libre tapo su boca

El peliverde estaba demasiado nervioso y su corazón estaba latiendo con tanta fuerza por el contacto de la niña pelirrosada hasta que al fin lo soltó, algo que no supo si le molesto ya que al no sentir la fuerza infantil en su brazo o su cálida mano en su boca lo hizo sentir raro sentía raro.

Gracias por salvarme—le sonrió—no sabía cómo librarme de eso

¿No sería más fácil decirles que no estas interesada? —fingió molestia—no siempre te podre cuidar

Eso es mentira—sus ojos verdes se abrieron y una tierna sonrisa apareció en sus labios—el segundo hijo siempre me está protegiendo y me agrada por eso, es como un héroe

El niño no sabía que hacer, su corazón latía con tanta fuerza que pensaba que Anya podría oírlo, pero no quería que eso sucediera ya que estaba mal que un niño de su clase tuviera esos sentimientos por una plebeya grosera

Es tu imaginación—dijo nervioso levantándose—pero si tú crees eso, no puedo cambiar tus pensamientos—le dio la mano para que se levantara—vamos a tu parada de autobús sino llegaras tarde a clase

Claro—le dio la mano y se levantó, pero quedo muy cerca de él

Damián se sonrojo demasiado y soltó rápido su mano para dar un paso atrás

Vamos entonces—camino rápido

Espera segundo—intento seguirle el paso—y si mejor me cargas

No seas tan arrogante—cerro los ojos y hablo con algo de vergüenza

Es que no sabía que tenías tanta fuerza—dijo emocionada—fue muy divertido verte bajar varios pisos

No digas nada—se sonrojo más—además—tomo aire para evitar ser tan grosero con ella—no podía dejar que te atraparan

Oh—se emocionó—parece que ya somos buenos amigos

No es cierto—se sonrojo

No puedo decirle que lo hice porque

Anya miro al peliverde y no entendió bien sus pensamientos difusos así que decidió recordar que le daba su mamá como premio por ayudarla así que se acercó a él y le dio un beso pequeño en la mejilla provocando que el niño se quedara helado y tocara su rostro

Gracias, segundo hijo—lo miro con ternura—no tengo con que pagarte, pero mi mami siempre me da un beso en la mejilla por ayudarla, es lo que starlight Anya te puede dar

Damián estaba tonito, el calor en sus mejillas lo hizo sentirse raro además de que tenía los ojos a punto de llorar porque tenía tiempo que no recibía un beso en la mejilla, pero no podía mostrar esas emociones a ella porque lo consideraba burdo y nada elegante, así que se giró y alzo la mano para caminar para así evitar que su corazón latiera con tanta fuerza

Nos vemos—camino rápido

Nos vemos segundo hijo—Anya comento mientras caminaba hacia los asientos destinados para esperar el autobús

El peliverde camino rápidamente hacia su dormitorio y aprovechando que sus amigos aun no llegaban de sus actividades que tenían programadas decidió meterse en sus cobijas y gritar por lo ocurrido, no sabía porque, pero ese beso en su mejilla lo había hecho muy feliz, pero no podía decirlo en voz alta ni a la ligera porque eso sería vergonzoso ya que era un Desmond.

Maldita enana—toco su mejilla aun sintiendo los tiernos labios de la pequeña—es muy linda, espera ¿Qué dije?, seguramente es como todas—se levantó y camino a su mesa para escribir en su diario, no podía bajar la guardia ya que esa mocosa seguramente era como todas y aunque no lo admitiera ese era su gran miedo.

Por otro lado, Anya llego a su casa y fue recibida por Bond quien se abalanzo sobre ella para llenarla de besos.

¿Llegaste Anya? —Loid salió de su habitación—bienvenida

Si—asintió—¿Mami?

Saldrá tarde de la oficina, pero empezare a preparar la cena—acaricio su cabeza—dime ¿tuviste un día bueno en la escuela?

Lo normal—dejo su mochila en el perchero—y el segundo hijo me acompaño a la parada de autobús

Qué bueno que Damián hizo eso—estaba sorprendido ante ese comentario, pero quería disimular ya que creía que su hija se llevaba mal con el segundo hijo de los Desmond

Y le agradecí dándole un beso en la mejilla—se sentó en la mesa—es que me salvo de los dos chicos nuevos, siempre aparece cuando lo necesito

Loid estaba sorprendido por la tranquilidad en lo que su hija decía esas cosas, si no fuera porque aún eran unos pequeños infantes de 6 años pensaría que podría haber un romance ahí, pero por lo que veía en su hija noto que ella solo tenía ojos para su anime de espías.

No tengo de que preocuparme—murmuro Loid mientras cortaba las verduras

Chapter Text

Después de ese momento que vivieron el segundo hijo de los Desmond y la hija de los Forger habían pasado dos años, en ese tiempo Anya había sido adoptada por la familia Forger de manera legal y todos habían dejado de tener secretos además de que ahora era hermana mayor de mellizos, por otro lado, los Desmond seguían siendo una familia respetada, la misión Strix había revelado los experimentos humanos que hicieron que Donovan Desmond actuara de mala manera, pero aunque eso no le quitaba la culpa de sus crímenes al fin pudo descansar sin cargar el secreto de esa organización aunque aún seguía en vigilancia por lo que Loid no se fue de Berlint y eso alegro a Anya.

Entonces en un frio invierno en Edén mientras la nieve caía lentamente antes de que terminaran las clases y fueran a vacaciones de invierno, Anya miraba con curiosidad un muñeco de nieve que había hecho Arnold junto a Freddy.

Se parece a Henderson—intento evitar reírse de la obra de arte de sus amigos

En sí, queríamos hacer a Bondman—ambos chicos hablaron con algo de vergüenza ya que ella no parecía impresionada

Chicos su obra de arte es horrible—Tertius llego junto a Connie—por ejemplo, miren mi obra de arte que hice con Connie—señalo un Bondman de nieve

Es hermoso—Anya corrió a verlo—aunque—lo observo de arriba abajo—siento que le falta más

¿Qué? —Tertius cayo de rodillas—gatita eres muy exigente

Te dije que le faltaba algo—Connie ajustaba sus gafas—pero no haces caso por querer impresionar a Forger

Mientras tanto en los pasillos, Damián caminaba junto a Ewen y Emile, pero cuando noto que Anya estaba riendo con esos tres chicos que no le agradaban decidió desviar su camino hacia ellos cosa que les causo extrañeza a sus amigos.

¿Qué hacen? —se dirigió solamente a Anya

Muñecos de nieve—señalo las obras de sus amigos

¿Dónde está Blackbell? —busco a la mejor amiga de la pelirrosada

Becky no vino—suspiro triste—pero Tertius, Fredy, Connie y Arnold me hicieron compañía para que no me sintiera sola

¿Por qué no me dijiste? —se veía alterado

Tienes clases con los grupos de inteligentes—lo miro a los ojos—no quería molestarte

Somos amigos—dijo sin pensar—bueno somos cercanos, no me molestaría estar haciéndote compañía

¿Qué? —Ewen y Emile miraron con curiosidad a su mejor amigos

O sea, somos de Cecile—se puso nervioso—no debemos mezclarnos con otros

Oye—Fredy se acercó—pero tu igual te llevas con otros chicos y chicas

Si, ¿Qué tiene de malo ser de otros pabellones? —Tertius se extrañó del comportamiento de Desmond

Bueno, eso es porque—se puso mas nervioso ya que no quería ser demasiado estúpido para decir que Anya le agradaba y a la vez no quería humillarse con sus amigos

Connie no era nada tonta, ella siempre había observado a Desmond y sus reacciones con diferentes chicas de la escuela por lo que sabia que para el chico de cabello verde Anya era alguien importante, además de eso, sabia que Becky le ayudaba o lo molestaba para que actuara con Anya, asi que en reemplazo de ella decidió intervenir.

Entiendo lo que dices—la chica se acomodó sus lentes—pero Forger puede juntarse con quien quiera, digo ambas somos de Cecile—sonrió provocándole escalofríos a Damián—pero gracias por preocuparte por ella

El peliverde se extraño que la niña rara de lentes hablara y sintió una especie de veneno en su voz como cuando hablaba con Blackbell sobre Anya, sentía muchos nervios y ganas de gritar, pero ¿Cómo podría actuar si sus amigos estaban ahí?

Segundo hijo—Anya se acercó al niño—dime ¿tú puedes hacer un Bondman para mí?

¿Por qué te haría algo? —se sonrojo por la cercanía y retrocedió

Sería algo lindo—lo miro con ternura cosa que Damián en su visión la vio iluminada por una luz muy brillante

Esta bien, pero no porque tú me lo pidas—camino a la nieve—Ewen y Emile ayúdenme

Pero—los dos rubios se quedaron confundidos, pero fueron a ayudar a su amigo

Anya camino hacia ellos porque quería ayudar cosa que hizo que tanto Fredy como Arnold fruncieran el ceño ya que ella no les ayudo.

¿Sera posible qué?

Connie pensó y aunque Anya lo leyó no entendió la palabra que quiso decir ya que estaba muy concentrada con la nieve. Cuando terminaron de construir el muñeco deforme de Bondman, Damián se sintió avergonzado porque estaba horrible y cuando se giro noto como Arnold, Fredy y Tertius se reían, quería correr, pero entonces Anya muy emocionada grito

¡ESTO ES UN BONDMAN! —alzo sus brazos—gracias, segundo hijo, te quedo magnifico—lo abrazo

Ah—sintió su corazón latir con fuerza—Ah

Oye tonta no lo abraces—intento separarla Emile

Si—Ewen intento igual ayudar a su regordete amigo

Deténganse—murmuro Damián cuando sintió que estaban separando a Anya de él—solo es un abrazo de amigos

¿Son amigos? —Connie se acercó—pensé que no te agradaba

El segundo hijo y Anya somos buenos amigos—cerro sus ojos y soltó el abrazo que tenía con Damián—muy buenos amigos—abrió los ojos y un deje de soberbia se asomaba en esa mirada

Damián estaba soñando, en su visión Anya era hermosa y más cuando decía algo donde lo involucrara, aunque eso significara que dijera que son amigos.

Bueno, ya cumplí lo que prometí—se giró—te llevo a tu parada de autobús

Si—camino hacia donde estaba su mochila—nos vemos chicos

¿Quieres que te acompañemos Damián? —Emile hablo

No—negó—iré a dejar a esta tonta sino se va a perder

Anya no es tonta—la niña le saco la lengua

Los 7 niños se quedaron mirando a Anya y Damián mientras caminaban peleándose, era raro, pero en esos dos años parecía que se habían acostumbrado al contacto entre ellos y esas bromas extrañas con sarcasmo.

Bueno, quiero ir por galletas—comento Connie algo incomoda ya que sus amigos se veían tristes—vamos

Claro señorita—Fredy le sonrió—ustedes dos ¿quieren ir?

Bueno—Ewen se giro

Cuando llegaron a la parada de autobús Anya miro el cielo mientras que Damián estaba concentrado en verla a ella sin que lo notara o eso creía él.

Segundo hijo—se giró a verlo—¿vas a llorar de que Anya se vaya?

Que dices tonta—se giró sonrojado—en tus sueños, en si que bueno que me libro de ver tu fea cara

Anya se acerco con una sonrisa burlona y comento con sarcasmo

Yo se que esperas que vaya a tomar el té con tu mami—cerro los ojos—asi que nos vemos

Cuando Damián estaba a punto de decir algo el autobús llego y Anya solo alzo la mano para despedirse, pero fue detenida por unas manos aun infantiles.

Tengo dulces KariKari—comento con seguridad—te veo en alguna fiesta del té de mi mamá

Está bien—se emocionó—nos vemos

El pequeño espero que se fuera la pelirrosada y camino arrastrando los pies por la nieve, no sabía porque, pero si iba a extrañar a Anya en esas vacaciones y esperaba que su mamá organizara una fiesta del té con la mamá de Forger.

Que tonto me oigo—suspiro provocando un poco de vapor debido al frio ambiental—no se porqué me siento asi cuando la veo—toco su mejilla donde le dio un beso hace dos años—y no lo ha vuelto a hacer

Cuando Anya llego a su casa dejo su mochila en el perchero y noto como Bond estaba haciéndole compañía a sus hermanitos menores quienes estaban jugando con bloques en el piso.

Son tan lindos—murmuro la pequeña pelirrosada y se hinco con ellos—oigan, hoy me fue bien en la escuela, parece que soy una celebridad de que salve la escuela—rasco su punta de la nariz con su mano y sonrió con soberbia—tanto que el segundo hijo ya me reconoce como mejor amiga

Pero lo que Anya no sabia es que ese sentimiento desconocido era algo más profundo que una simple amistad.

Chapter Text

Anya ahora tenía 8 años, aunque fingía tener 9 años para que no la separaran de sus compañeros y para que no se descubriera la mentira de los Forger, pero las cosas estaban siendo complicadas en ese periodo de tiempo ya que no sabía porque el segundo hijo de los Desmond le hablaba cortantemente.

Aun no entiendo—dijo susurrando mientras ponía su cabeza en la mesa que compartía con Becky—hace 2 meses ha estado asi

Bueno—la castaña dejo su cuchara—dijiste que tenían la tradición de comer helado cada quince días ¿o me equivoco?

Si—se levantó y asintió

Pero ese fin de semana ¿se encontraron a Tertius, Arnold, Freddy, Meg y Connie? —la observo esperando que reaccionara

¿Qué tiene que ver? —alzo la ceja confundida—no entiendo

Olvídalo—suspiro—aun eres muy pequeña para entender las cosas

Explícame—la tomo con delicadeza de la mano—es que no entiendo

Mi comida está demasiado deliciosa—tomo su cuchara y empezó a comer de nuevo

Becky—la soltó mientras fingía llorar

Más tarde en clase de gimnasia, Anya buscaba al segundo hijo en su clase de futbol, pero no había rastros de él y suspiro, seguramente George tenía razón y estaba en algún examen.

Esta distancia es horrible—suspiro—extraño ir por helado

Cuando terminaron la clase, la pequeña fue con su mejor amiga hacia el patio para comer un refrigerio que envió Loid, pero mientras buscaban un lugar para sentarse, unos niños de más grandes pasaron sin fijarse y por evitar que Becky se lastimara la tomo del brazo para jalarla del lugar, pero no se fijó que había un hoyo en el pasto y provoco que la pelirrosada se torciera el pie y se lastimara las rodillas.

¡ANYA! —Becky se agacho para ver a su amiga—espera, ¡MALDITOS GIGANTES CAMINEN CON CUIDADO! —les grito fuerte y luego regreso su preocupación cuando vio que su amiga se acostaba mirando hacia el cielo—llamare a alguien para que pueda ayudarme a llevarte a la enfermería, no te muevas

Anya estaba molesta mientras miraba las nubes ya que pudo haber evitado ese accidente si hubiera observado el pasto con detenimiento, pero parecía que debía pulir el entrenamiento que Bondman le daba en las caricaturas que veía.

¡ENANA! —una voz conocida se hizo presente

¿Segundo? —se intentó levantar, pero el niño la detuvo

¿Estas bien? —se preocupó al ver la sangre en su rodilla

Me torcí el pie—suspiro—necesito ir a la enfermería

Te llevo—la levanto, pero noto que le costaba estar de pie—maldición—la soltó y se agacho para que se subiera en su espalda—sube

Que vergonzoso—dijo sonrojada

Ya te he llevado de esta manera—cerro los ojos para evitar un sonrojo—súbete

Ok—la chica se acomodo

El chico peliverde la llevo sobre su espalda y sintió como su corazón latía con fuerza, pero no era momento de ponerse nervioso, entonces Anya aprovecho esto para hacerle preguntas que necesitaba

¿Me odias? —murmuro algo triste

No—dijo tajantemente—si te odiara, ¿no crees que hubiera rechazado ayudarte cuando Blackbell me lo pidió?

Tienes razón—suspiro—entonces ¿Por qué estas molesto conmigo?

No estoy molesto contigo—su mandíbula se tensó un poco para evitar ser demasiado demostrativo con sus emociones—lamento si pensaste eso, solo son cosas mías

Pero me has estado evitando—murmuro triste—Anya se sintió solita

¿En serio? —se sorprendió tanto que casi la tira, pero la sostuvo de nuevo—vaya, no pensé que fuera tan importante para ti

Eres mi preciado amigo—comento con algo de vergüenza ya que no le gustaba mostrarse tan infantil—obviamente me pone triste que no hablemos como antes

Sobre eso—se detuvo—lamento lo que te cause, no quería que esto se volviera algo tan odioso y mucho menos hacerte pensar cosas negativas

Entonces ¿Qué fue? —se sorprendió ante sus palabras

Nada importante—siguió caminando

Dime o leo tu mente—lo amenazo

Deberías dejar de hacer eso—se avergonzó—no es de buena educación leer la mente de alguien

Pero si no me dices nada no entenderé—suspiro—pensé que eras listo por ir a clases de inteligentes—Anya recordó algo—espera ¿no tienes examen?

Pedí permiso—cerro los ojos rápidamente

Oye, vamos rápido a la enfermería y ve a tu examen—se preocupó—maldición, Becky pudo decirle a alguien más

¿A esos tontos? —su voz sonaba molesta

¿Te desagradan? —se sorprendió—pensé que intentabas llevarte bien con todos

Solo intento ser cortes—suspiro

Segundo, ¿estas enojado de que los invite a comer helado ese día? —entre su inocencia infantil pudo unir unas partes del discurso del peliverde con lo que ocurrió ese día que la dejo con los chicos comiendo helado

No puedo evitar que tengas amigos—murmuro—son tus amigos y no tengo derecho a intervenir

Debiste ser sincero—le pico el brazo—pude evitar invitarlos

Ya te dije—dijo sonrojado—no puedo intervenir en tus amistades

Pero segundo—su voz sonaba triste—para mi eres importante, eres mi primer amigo hombre y mi segundo mejor amigo

Damián sintió como su corazón latía con fuerza mientras se sonrojaba demasiado, no sabía que decir tenia los nervios tan descontrolados que por poco pierde el equilibrio, pero casi llegaba a la enfermería

Lamento comportarme infantil—tomo su mano—disculpa

Discúlpame a mi—lo abrazo por el cuello—prometo ser más consciente de las cosas y no invitar a gente ajena cuando es un momento de nosotros dos

No te hagas ideas tontas—se sonrojo y se puso más nervioso al sentir ese pequeño abrazo—si la gente te oye pensara tonterías

Pero Anya es feliz de tener momentos contigo—su voz sonaba feliz—porque el segundo hijo es mi segundo amigo favorito

Damián ya sentía que su corazón estaba por salirse de su pecho y camino muy rápido para dejar a Anya en la enfermería donde la asistente le sonrió con ternura por verlo tan sonrojado.

Nos vemos luego, tengo un examen—la dejo en la camilla

Éxito y disculpa si pierdes tiempo—su voz sonaba ahora triste y unas pequeñas lagrimas querían salir de sus ojos verdes

El peliverde no pudo evitar voltear y al verla abatida se regresó para limpiarle las lágrimas que descendían de sus ojos

Si saco buena nota—le sonrió con soberbia—tienes que invitarme un helado este fin de semana

El rostro de Anya se ilumino y Damián se sonrojo

Si, es buena idea—cerro los ojos—pero no pidas el más caro que mis ahorros aun no permiten esos gastos

Es una promesa—le puso su dedo para sellarlo—nos vemos, enana

El niño salió de la enfermería y Anya sonrió, parecía que su amistad con ese chico otra vez había vuelto a ser la misma, mientras que la enfermera solo sonrió con ternura al ver un pequeño amor empezando a crecer.

Más tarde, Loid llego junto a Yor a la escuela Edén para recoger a Anya quien seguía en la enfermería, la pelirrosada se emocionó al ver a sus padres y la asistente les comento su pronostico respecto a su pie lesionado, además de que les dijo que era muy valiente. Ambos padres la abrazaron y luego Loid la cargo para irse al hospital para revisarla bien.

Espero no sea algo grave—dijo el rubio

No, yo sé que será una pequeña lesión—miro a su papá como si supiera su pronostico

Pero mientras caminaban hacia la salida, Anya vio como Damián caminaba con sus amigos entonces el peliverde sintió la mirada de ella y fue hacia donde los Forger estaban

Buenas tardes—comento con tranquilidad—¿ya iras a casa?

Si—asintió—pero primero papá me llevara al hospital

Que todo salga bien—la miro con preocupación

Por cierto, joven Desmond—hablo Yor—gracias por cargar a mi hija, es muy amable

Si gracias por cuidarla—Loid lo observo

No es nada—se giró algo sonrojado—hasta luego

Entonces cuando los Forger estaban por salir de la institución, Damián se giró y le grito a Anya

¡SIGUE NUESTRA PROMESA! —grito con las mejillas sonrojada provocando que Ewen y Emile lo vieran confundidos

¡SI! —Anya alzo la mano

Damián salió corriendo mientras Ewen como Emile lo perseguían con curiosidad de ¿Cómo habían hecho las paces si Damián había jurado que no le volvería a hablar después de que invito a esos niños que le desagradaban?

¿Qué promesa Anya? —Loid la miro con curiosidad

Es un secreto—Anya puso su índice en sus labios—de mejores amigos

El rubio no sabía la razón, pero un sentido raro le estaba surgiendo al girar para ver cómo era perseguido Damián Desmond, pero no sabía que palabras darle y creía que era solamente la preocupación por saber si el tobillo de Anya estaba bien.

Chapter Text

En un día demasiado frio, Anya y Yor llegaban a la mansión Desmond donde Melinda las estaba esperando con emoción.

Que hermosa te ves Anya—la peliverde se acercó a la niña para abrazarla—si te quedo el vestido que te mande a regalar por tus 10 años

Si—asintió emocionada—muchas gracias, señora mamá del segundo hijo

Es un nombre muy largo—se agacho—ya te había dicho que podías decirme señora Melinda—le sonrió con ternura y se levanto para ver a Yor—Anya es tan pequeñita que parece que tiene 9 años

No—la pelirrosa sintió que sudaba frio—de por si soy de estatura pequeña

Lo bueno es que los niños crecen rápido—la peliverde miro el reloj de su pared—en fin, vamos a tomar el té, invite a mis hijos a que nos acompañaran, pero Demetrius quiso seguir estudiando ya que casi son los exámenes de ingreso a la universidad

Vaya—se sorprendió Yor—el joven Demetrius es muy inteligente seguramente pasara sin dificultad

Gracias—comento con ternura—aunque su plan es ir a una escuela lejos de Ostania, pero esta bien, a veces tenemos que soltar las alas de nuestros hijos para que crezcan fuertes

¿Alas? —Anya miro confundida a la señora

Es una frase pequeña—señalo la mesa—vengan vamos a tomar el té

Las tres mujeres se sentaron en la mesa cuando unos pequeños pasos se hicieron presentes

¿Damián? —Melinda miro a su hijo—vaya, que elegante te ves, ¿quieres tomar el té con nosotras?

Si mamá—intento no quedarse mirando lo linda que se veía Anya quien le alzaba la mano para saludarlo—termine de estudiar y tenia estas galletas, seguramente las disfrutaremos

¡LAS GALLETAS KARIKARI! —Anya grito emocionada

Anya—Yor la miro—disculpe señora Melinda

No te preocupes—la peliverde se rio con ternura—Anya siempre tiene mucha energía y eso me agrada—observo a su hijo quien parecía avergonzado—hace que mi pequeño Damián actué como un niño pequeño

Eso no es cierto madre—se sonrojo

La fiesta de té se llevo a cabo con tranquilidad, ambas madres estaban compartiendo historias divertidas mientras que los niños estaban discutiendo sobre tonterías escolares, pero de pronto Melinda miro a esos dos niños y sonrió con ternura perdiéndose en sus pensamientos.

Sabia que elegir ese vestido era buena idea combina bien con lo que trae Damián, hasta parecen pareja

La pelirrosada no leyó lo ultimo porque estaba muy feliz comiendo las galletas que el segundo hijo le ofreció.

Mas tarde, Damián se aburrió de la plática de su madre con la señora Forger por lo que le dijo a Anya que, si quería ir a ver a Max, cosa que la pelirrosada acepto. Cuando llegaron al gran jardín de los Desmond, un pastor alemán salió corriendo hacia la pelirrosada quien lo abrazo con fuerza.

Max—se emocionó—parece que no me olvidaste

Le agradas—comento Damián

Es que somos mejores amigos—acaricio la cabeza del perro

Damián observo a Anya y sonrió, le agradaba su inocencia infantil y su forma de hablarle a las mascotas, parecía que ella no sabia nada de la maldad de los adultos y quería que siempre sonriera asi, no obstante, al estarla viendo noto unas migajas de galletas en sus labios y saco su pañuelo.

Tonta tienes galletas—se acerco y limpio su cara—eres muy desorganizada, no eres nada refinada—se burlo

Anya es refinada—inflo sus mejillas

Pero esa pequeña platica fue interrumpida por alguien que soltó una expresión de ternura y Damián al girarse encontró a Maryjane con Jeeves.

¿Qué hacen? —se puso nervioso y guardo su pañuelo—yo solo quería ayudar a esta torpe

No es de caballero decirle torpe a una señorita—Jeeves lo regaño con delicadeza—un gusto verla señorita Forger

Hola—alzo la mano para saludar

Que bonita se ve señorita Forger—Maryjane se agacho para observarla—ese vestido combina demasiado bien con su cabello

¿Me veo linda? —se giró emocionada—la señora Melinda me lo regalo

Te ves adorable—la asistente de los Desmond sonrió con ternura

Se te va a subir a la cabeza eso—Damián dijo intentando disimular su sonrojo

Estas celoso de que no te ves tan adorable como yo—lo reto

Cállate—la miro molesto

A que yo te gano al correr—la pequeña empezó a correr

Tonta, esos zapatos no son para correr—la siguió sin importar que tampoco sus zapatos eran para ese tipo de actividades

Los dos adultos se quedaron mirando la escena y sonrieron con ternura

Parece ser que se llevan demasiado bien—comento Jeeves

Son dos niños creciendo sin una guerra—los miro—aunque a veces siento que a nuestro señorito le gusta la señorita

¿Crees? —se burló—sí que eres distraída Maryjane

No soy distraída—inflo sus mejillas—pero, pienso ¿en que tipo de adulto se convertirán? Y ¿están juntos o esto será una simple amistad?

Son preguntas que también me hago—Jeeves suspiro mientras observaba como Anya y Damián jugaban con Max—y espero que nuestro pequeño maestro pueda ser feliz junto a la señorita Forger

Cuando la tarde llego, Yor y Anya salieron de la mansión mientras eran seguidas por Melinda y Damián

Fue un grato momento—Melinda tomo las manos de Yor—espero verte pronto en nuestra reunión de mujeres patriotas

Si—asintió—ya estoy emocionada por el partido de vóleibol

Seguro ganaremos y nos divertiremos—subió un brazo—porque tenemos a Yor Forger—se agacho—bueno pequeña Anya, nos vemos pronto—acaricio su cabello

Si señora Melinda—le sonrió—nos vemos y de nuevo gracias

Es que te veo como una hija—bromeo mirando a su hijo quien se sonrojo

Madre—murmuro algo incomodo Damián

Despídete—observo al peliverde

Nos vemos enana—la miro a los ojos—recuerda hacer la tarea de invierno

Si—asintió—procura dormir más, te ves muy cansado y juega mucho con Max

Está bien—la miro a los ojos de nuevo como si quisiera grabar su rostro ya que se volverían a ver hasta el regreso a clases

Lo sé—la niña sonrió con esa cara que él le daba molestia—soy linda

Que tonta eres—le dio un pequeño golpe con sus dedos en la frente—nos vemos entonces

La familia Forger se subió al coche de Loid quien las estaba esperando fuera de la casa y miro todo, no sabía porque, pero sentía una sensación rara desde la vez que fue por Anya a la escuela por su lesión en el tobillo cuando miraba a Damián, era como si un instinto quisiera salir a la luz.

¿Te sucede algo? —Yor miro curiosa a su esposo—te pusiste blanco

No se—dijo fingiendo una sonrisa

Papá es raro—Anya se subió en la parte trasera—por cierto, tenemos que ir por Liam y Markus

Cierto, seguramente ya hicieron que Franky les comprara galletas—se burló la pelinegra

¿Les fue bien? —el rubio intentaba encontrar información

Si—asintió Yor—tengo partido la otra semana, espero puedas ir

Claro—le sonrió—quiero apoyarte

¿Debería ir? —Anya miro a Yor

Pero no te gusta ese deporte—el rubio miro por el retrovisor a su hija

Es que la señora Melinda dice que me ve como su hija—comento sin pensar

Y esas palabras casi hicieron que Loid Forger chocara conta un arbusto cercano, parecía que ese sentimiento raro que tenía pronto tendría un nombre.

Chapter Text

El sonido de los juegos mecánicos se hacían presentes mientras una niña de cabello rosado corría junto a su mejor amiga

¡ESTO ES EMOCIONANTE! —Anya se detuvo frente a la montaña rusa—Becky súbete conmigo

Si—asintió emocionada—Anya fue buena idea que hicieras tu fiesta de 11 años en la feria

Lo sé—rasco su nariz con un dedo mostrando una sonrisa de soberbia, ya que habían pasado 5 años después de que la adoptaron y nadie sabia su verdadera edad la cual era 10 años

Enana—Damián se acerco a la chica mientras era seguido por sus amigos

Segundo—le sonrió—que bueno que viniste, ¿te trajo Jeeves?

No—negó y señalo a Melinda quien le sonreía—quiere darte tu regalo

Ok—alzo sus manos y se fue hacia donde la peliverde mayor la esperaba

Vaya—Becky se acercó a Damián—parece que tu mamá ama a Anya, ¿y quien no?

Son tonterías—se sonrojo

Parece que si aceptarían que salieras con ella—se burlo

Deja de decir tonterías Blackbell—inflo las mejillas y se giro

¿De que hablan? —Anya regreso

De que Damián es un tonto—se burló Becky

El gran Damián no es un tonto—Emile intento defenderlo—solo no le gusta la tonta de Forger

¿Yo que tengo que ver en la pelea? —la pelirrosada los miro confundida

No les hagas caso—Damián se giro hacia Emile para lanzarle una mirada de molestia—en fin ¿Qué haremos?

Estoy sorprendida que vinieran los tres—la castaña quiso abrir la conversación—ustedes siempre rechazan las invitaciones a ferias

Bueno, Damián quería ir a la feria—alzo los hombros Ewen—y creo que ya somos amigos todos ¿no?

Anya se emociono y alzo los brazos

Somos buenos amigos—tomo el brazo de Becky—vamos a los juegos

Gatita—una voz los interrumpió

Si vinieron—la pelirrosada sonrió con emoción—Anya tiene muchos amigos

Oye—Becky de nuevo se acercó a Damián—¿esto no te molesta?

Claro que no—cerro los ojos y fingió indiferencia cruzando los brazos—la enana puede juntarse con quien quiera—abrió los ojos—¿a ti no te molesta que tenga otra amiga?

No—negó—me agradan Meg y Connie, son amables y divertidas, además querer monopolizar a alguien no es de amistad

¿Monopolizar? —alzo la ceja curioso

Cuando un chico acapara la atención de una chica—se burló—lo que tú haces en clases

Eso es mentira—se avergonzó—vamos Emile y Ewen, vamos a jugar

¡SEGUNDO HIJO! —Anya le grito—vamos a jugar todos

Pensé que iríamos a recorrer esto juntos Anya—Fredy la miro confundido

Es mi cumpleaños y quería que todos fuéramos—sonrió emocionada—mientras más gente, más divertido

Becky sonrió con ternura y luego suspiro, su mejor amiga aun era muy pequeña para entender el amor que estaba creciendo entre esos niños a su alrededor

Vamos entonces a la casa de los sustos—sugirió Connie

Divertido—la pequeña se emociono

Todos los niños caminaron a la casa de los sustos mientras que Loid y Yor platicaban con los padres o tutores de los invitados de Anya.

Al llegar a la casa de los sustos, todos se quedaron asombrados por lo real que se veía y poco a poco el miedo se hizo presente en Arnold, Tertius, Meg, Ewen, Emile y Damián

Siento que somos pequeños para esto—dijo Emile—deberíamos irnos a otro juego

Que miedosos—se burló Becky—sino entramos Connie y yo—se giró a Damián—Fredy y Anya

El peliverde sabía que Blackbell quería hacerlo molestar por esas insinuaciones asi que, aunque tenía mucho pánico de entrar decidió convencer a todos para que fueran porque un imperial escolar no era miedoso.

Entonces quedaran—Becky miro a todos—Connie con Tertius porque si se desmaya ella sabe resucitar muertos, Ewen y Meg porque el rubio de peinado chistoso es bueno descifrando los laberintos, Arnold con Emile porque un golpe de Emile hace que todos quieran salir corriendo y—se giro donde Anya la miraba confundida—Anya te toca ir con el miedoso de Desmond por si se orina en los pantalones

Cállate Blackbell—grito sonrojado Damián—yo no me hago en los pantalones

No te preocupes Segundo hijo—lo tomo de la mano e hizo una mueca para mostrar su genialidad—yo te protegeré

Damián quería gritar, no sabía porque, pero su corazón empezó a latir con tanta fuerza y sus mejillas se sonrojaron como si fuera una damisela en peligro, pero en eso volvió en sí y movió la cabeza para evitar mostrar algo que no quería frente a sus compañeros de escuela.

No seas tan molesta—fingió querer quitarse la mano de la niña

Al entrar a la casa de terror, Anya estaba demasiado emocionada que soltó la mano de Damián ya que las exposiciones eran demasiado realistas, el peliverde solo suspiro de alivio porque la casa estaba oscura y seguramente nadie vería su pequeño sonrojo, además de que sentía que su rostro revelaba molestia de que dejo de tomarlo de la mano, pero si no fuera poco, su mente estaba en un duelo que Anya decidió ignorar porque era más entretenido el espectáculos.

Parece que no hay fantasmas—suspiro Anya algo desmotivada—en fin, vamos a la salida

Si—la siguió

Pero el sonido de una puerta abriéndose hizo que empezara a gritar de susto, era un monstruo mal hecho, pero para alguien de 11 años era tan real que Damián estaba acobardándose, no obstante, Anya lo tomo de la mano de nuevo y empezaron a correr juntos hacia la salida donde ya los esperaban.

Eso estuvo divertido—se giró emocionada—pude defenderte

Enana—se quedo petrificado mirando su rostro, pero luego soltó su mano fingiendo molestia—no me defendiste

Casi te quedas ensimismado—se burló—te defendí segundo hijo

Basta—se sonrojo

Vaya, parece que se la pasaron bien—Becky se acerco con una sonrisa de burla

Cállate—el peliverde se giro

Vamos a otros juegos—Connie miro como Meg estaba llorando junto a Tertius—sino ellos soñaran feo

El grupo de niños se fueron a todos los juegos de la feria, al inicio algunos estaban reacios para subir a juegos extremos para su edad, pero fueron convencidos por Anya quien estaba demasiado feliz de subirse a la montaña rusa, los columpios colgantes, el torbellino, los coches chocones y hasta que llegaron al más emocionante un nuevo juego llamado el vértigo, el cual consistía en una montaña rusa que tenia una forma de regresión hasta el punto de inicio.

Vamos—dijo alzando el brazo

Becky observo el panorama y sintió por primera vez escalofríos pero recordó que su maestra Yor no entrenaba niñas lloronas asi que se apunto para subirse, Tertius los rechazo y se quedó con Meg quien aun estaba vomitando junto a Arnold, Emile decidió subirse con Connie ya que le aposto una galleta de la tienda de dulces, Ewen palideció un poco y se fue con los chicos que vomitaban, Fredy se apunto para subirse ya que le fascinaban los juegos extremos mientras que Damián, bueno él ya se había disociado desde el primer juego extremo asi que cuando vio ya estaba en la fila siendo de nuevo emparejado con Anya debido al acomodo de Becky.

Al terminar el juego, Damián ya no sabía ni a qué hora era, sentía sus piernas temblar y una rara sensación de vomitar, pero entonces Anya lo tomo de la mano y les dijo a todos que irían a un juego tranquilo, los chicos esta vez no fueron con ellos porque Becky les dijo que fueran a sentarse.

Al llegar a la rueda de la fortuna, Anya soltó a Damián y ambos se subieron a la góndola para mirar a la ciudad.

No se porque no quisieron venir si este es mi juego favorito—se asomó por la ventanita—es maravilloso ver Berlint de noche

Creo que todos vivieron emociones fuertes—intento no tartamudear por aun sentir esa sensación rara de vértigo—eres un monstruo de las emociones fuertes

Pero fue divertido—le sonrió con ternura—gracias por haber venido, lamento si pasaste un mal rato

El peliverde la miro, su rostro mostrando tranquilidad iluminado por la luz de las farolas de la calle y de la luna la hacían ver tan hermosa, pero movió su cabeza antes de que oyera algún pensamiento raro.

No me molesto—la miro—fue divertido—un pequeño rubor se hizo presente, pero ¿no hubieras preferido venir con Blackbell?

Leí tu mente hace rato—lo observo—lamento hacer eso, pero creo que leí que querías darme algo y como no quieres que tus amigos vean por eso le pedí a Becky que los distrajera

Ah—puso sus ojos en blanco ya que sabría que tendría que hablar con Becky sobre que le dio a Anya y explicarle que eran solo amigos—bueno—saco de su pantalón una caja algo doblada—era esto

¿Son dulces? —se emociono

No tonta—suspiro de frustración—ábrelo

La pequeña lo abrió y sus ojos se iluminaron al ver un pequeño collar de una estrella

Esto parece caro—se sorprendió

Quería felicitarte por ser imperial escolar y por tu cumpleaños—cerro los ojos para evitar sonrojarse—se que te costo mucho ganar la ultima estrella y por eso—su voz se hizo más baja y nerviosa—por eso yo

Es demasiado bonita—se emociono y la saco de la caja—la voy a atesorar mucho, es un excelente regalo

Me alegro que te gustara—suspiro aliviado ya que le había pedido consejos a Becky para regalarle algo

¿Pudieras ayudarme con el collar? —se giró y se alzó su cabello algo largo

Si—se levantó tímidamente y sin ponerse nervioso le coloco su collar a la chica

Pero cuando al fin le puso el collar la góndola se abrió y fuera de ahí estaba Loid Forger quien le hizo una mirada algo rara.

¿Qué hacen? —comento intentando ser amable

El segundo hijo me regalo esto—le mostro su collar—me estaba ayudando a ponérmelo

Oh es un hermoso detalle joven Desmond—Loid sonrió, pero algo en su interior sentía algo raro—gracias por darle un bonito detalle a mi hija

No es nada—susurro algo nervioso

Vamos a donde están todos—Anya lo tomo de la mano—nos vemos más tarde papá

Loid se quedo helado al ver como su hijita pequeña corría de la mano con Damián quien parecía estar super nervioso de ese contacto que sintió de nuevo una sensación rara como cuando salían por helado cada quince días o cuando Anya dijo que Melinda la consideraba una hija, era algo raro y no quería descubrir que era esa sensación.

Chapter Text

La lluvia parecía que sabia lo que el corazón de una persona sentía, mientras mas torrencial se hacia por fuera los rumores sobre la noticia se estaban disipando, todos estaban sorprendidos porque nadie imaginaba que Donovan Desmond se suicidaría un día antes de su juicio.

Esto parece que si fue su culpa—murmuro un chico de grado mayor—seguramente sus hijos serán igual que él

Anya ya no era la misma niña insolente que era impulsiva, a sus "12 años" ya intentaba comportarse como una señorita que luchaba por la justicia sin ser tan infantil, asi que cuando oyó ese rumor entre esos chicos mayores se levanto de la silla del comedor y camino hacia él.

El segundo hijo no es una mala persona—lo miro con molestia—repite eso y te arrepentirás—apretó su puño

Uy no sabia que su noviecita lo defendería—intento darle un golpe en la frente, pero Anya lo esquivo provocando que el chico la mirara con sorpresa

No soy su novia, soy su mejor amiga—se giró—y te la veras conmigo si haces una tontería, recuerda que no soy tan femenina como todas

Y era cierto, aunque se comportara como una dama más consciente aun tenia acciones algo infantiles con respecto a las peleas, es por eso que evitaban meterse con ella o con Becky ya que eso significaba estar dos días en la enfermería.

Los adolescentes se fueron de la cafetería llenos de miedo mientras que Anya regresaba a comer con Becky quien la miro con curiosidad.

¿Qué sucede? —la miro a los ojos

Parece ser que Donovan Desmond se suicidó—suspiro—sucedió en la mañana

¿Qué? —se horrorizo ante eso—dios, con razón no he visto a Desmond

Es lo mejor—cerro los ojos y dejo su cuchara en el plato—lidiar con estos idiotas solo harían que se sintiera frustrado

Cuando Becky iba a decir algo, unos pasos acelerados se hicieron presentes y notaron como Emile como Ewen se veían agotados.

¿Qué sucede? —Anya los miro preocupados y empezó a leerles la mente

Por favor Forger—Emile la miro con un rostro lleno de frustración—habla con Damián, no ha querido pararse de su cama

Te lo imploramos—Ewen la miro—intentamos hacer algo, pero no podemos sacarlo de su trance

Y por eso—el robusto tomo aire—te imploramos que vayas, eres la única que puede ayudarnos

Anya los miro con duda ya que sabia que Damián se hacia el fuerte en varias situaciones, pero luego al ver que él se encontraba más distante que cuando supieron la verdad de los Desmond decidió actuar, por lo que miro a Becky quien solo le alzo el pulgar como signo de ánimo y partió hacia donde estaba el peliverde

¿Creen que pueda? —Becky se giró con los chicos—parece algo difícil

Es nuestra última esperanza—se sentaron con ella—al final, Anya Forger siempre ha sido alguien importante para nuestro amigo

La pelirrosada entro al dormitorio de chicos y busco la habitación de Damián, tenia que ser cuidadosa ya que podría meterse en problemas que la llevarían a un truenito, pero cuando al fin lo encontró se metió y cerro la puerta con seguro.

Anya observo las cosas a su alrededor, todo parecía ordenado como era de esperarse de un hombre con el apellido Desmond, pero cuando llego a donde él estaba noto que estaba cubierto hasta la cabeza con su cobija asi que lo movió un poco para hacerle saber que estaba ahí.

¿Qué haces acosadora? —murmuro algo molesto y se levantó—si te ven van a regañarte

Vine a verte—se sentó en la cama—¿Cómo estás?

No sé qué responder a eso—la miro con fastidio—si vienes a intentar animarme no lo harás

No—le dio la mano para transmitirle cariño como él luego lo hacia cuando ella tenia miedo de los exámenes—vine acá como tu amiga, recuerda que—tomo aire—no tienes que comportarte como un Desmond conmigo, solo se Damián

Si soy la misma persona—sonrió con algo de pesar, pero no sabía porque sentía la necesidad de llorar—yo soy Damián Desmond y soy

Pero no pudo soportar más y la abrazo tomándola de sorpresa, por lo que solo lo envolvió con sus brazos y mientras la lluvia golpeaba la ventana, Damián decidía ser sincero por primera vez

Yo sé que padre era malo, después de que salió la noticia yo supe que—las lagrimas estaban saliendo descontroladamente de sus ojos—no pensé que fuera tan malo o que apoyara los experimentos con humanos, para mí eso fue la gota que derramo el vaso para dejarlo de admirar, pero—mordió su labio inferior para evitar soltar un sollozo desgarrador pero no pudo mantener la fuerza ya que Anya empezó a darle palmaditas en la espalda y a acariciar su cabello—maldita sea, a pesar de que fuera un hombre malvado y que quería estallar una guerra era mi padre—apretó con fuerzas a Anya sin lastimarla—quería que viera mis logros como los vio con Demetrius, quería que viviéramos tranquilos y por primera vez ver una sonrisa sincera saliendo de sus labios por verlo, maldita sea soy un mocoso infantil aun

No—Anya también ya estaba llorando—tu no eres un mocoso infantil, eres un chico que perdono a su padre y que quería darle otra oportunidad, no eres un mocoso infantil por tener sueños o fantasías con él, porque al final era tu familia

No se como pudiste soportar la muerte de tu madre cuando eras una niña—comento llorando—lamento si eso sonó grosero

No pasa nada—Anya hablo con ternura—cuando mamá se fue, yo decidí llevarla en mi corazón y aunque ya no la recuerde se que ahora soy libre como una mariposa

Enana—se separó de ella—lo lamento

No tienes que disculparte—le limpio sus lágrimas con sus dedos—somos importantes el uno con el otro, es normal ser vulnerables, esa es la amistad

¿También has visto llorar a Blackbell? —la miro limpiándose sus lagrimas con la manga de su pijama

Es información secreta—puso su dedo índice en sus labios—como esta platica, Anya es buena para mantener secretos ocultos

Gracias—la volvió a abrazar

El segundo hijo puede llorar con Anya todo lo que necesite, no me iré hasta que él haya liberado todo de su corazón y pueda despedirse de él con una sonrisa—acaricio su cabello—gracias por ser sincero conmigo por primera vez con respecto a tus sentimientos, prometo no dejarte nunca solo

Damián no sabía porque, pero esas palabras y ese abrazo lo hicieron sentir en paz, además de que pudo liberar todo lo que su corazón estaba guardando en su interior, como si Anya Forger fuera esa medicina, pero aún no entendía que era eso o porque una persona ajena a su círculo familiar podía hacerlo sentir tan tranquilo.

El reloj marco las 9:00 pm y Loid estaba preocupado por su hija ya que no había recibido ninguna llamada de que se había ido con los Blackbell, tenia miedo de que algo malo le hubiera pasado, pero no podía moverse de su casa en caso de que le llamaran ya sea por alguna misión por la noticia de Donovan o si ella avisaba que se quedaría con Becky.

Pero en eso la puerta se abrió y Anya entro a su casa dejando su mochila en el perchero, tenia un rostro raro entre tristeza, dolor y confusión.

¿Por qué llegaste tarde? —la miro molesto su papá

Estaba con el segundo hijo—suspiro—él me necesitaba por lo de su papá

Loid suspiro, sabia que su hija se había vuelto muy unida con ese niño molesto y era obvio que necesitaría de ella en ese momento tan doloroso, además de que recordó que Yor igual se había ido a ver a Melinda desde las 2:00 pm para brindarle su apoyo.

Esta bien, pero avisa por favor—se fue a la cocina

¿Mamá? —lo miro

Con la señora Melinda—puso la leche para hacerle cocoa

Oh—se sentó en la mesa pensativa—papá, cuando eras niño ¿lloraste cuando tus padres murieron?

El rubio suspiro, era una pregunta algo difícil de responder, pero entendía que no era con malicia ya que sabia que la madre de Anya había muerto, asi que se acerco a ella y le dio su cocoa caliente

A veces el dolor es indescriptible, me imagino que tú lo sabrás—acaricio su cabello con ternura—no hay palabras para explicar como un humano puede sobrellevar eso y me imagino que Damián tampoco sabrá como explicarlo

Es difuso—tomo su cocoa—pero quiero estar ahí para ayudarlo

Loid sonrió con ternura y algo de dolor, sabia que Donovan tomo esa decisión porque saldrían sus actividades a la luz y seguramente muchos de los que lo apoyaban lo traicionarían. Aunque él sabia que hacia un bien tratando de investigar a los Desmond también entendía que le estaba haciendo un daño a esa familia, no sabia a veces lidiar con esa culpa por eso no podía impedir que Yor o Anya se relacionaran con ellos.

Intenta apoyarlo mucho—acaricio su cabello mientras su culpa empezaba a instalarse en su pecho

Papá—lo miro—tampoco estas haciendo algo malo, estas salvando vidas—le sonrió con tristeza

Lo sé—suspiro—pero quisiera evitar que Melinda, Damián y Demetrius sufrieran, porque al final Damián es un niño y yo quería un mundo donde los niños no lloren

Harás tu mejor esfuerzo—Anya le alzo su brazo—tranquilo papá

Loid sentía las palabras de su hija como un abrazo al corazón y se levanto de la mesa para preparar la cena para cuando llegara Yor, entonces el sonido de la puerta de los mellizos se abrió

Papi—murmuro Liam—quiero cocoa caliente

Igual yo—Markus se emocionó—Bond igual quiere

Bond no puede tomar cocoa—Anya camino hacia donde estaban sus hermanos menores y les dio un beso en la frente—¿despertaron de la siesta?

Si—asintieron al unísono

El rubio observo la escena, Anya cargando a sus hermanos de 5 años mientras Bond dormitaba cerca, era la escena perfecta pero sabia él que en su corazón los únicos niños que podía proteger era a ellos, era algo egoísta ya que también quería cuidar a más niños, pero debido a su trabajo podrían resultar con daños colaterales, todo era un caos en su mente, pero recordó las cálidas palabras de su hija y decidió buscar una opción menos dolorosa para los Desmond con WISE.

Mas tarde después de que Yor llego de consolar a Melinda, Anya decidió salir al balcón de su apartamento y noto como la lluvia se detenía, no sabía si venían días lluviosos en su ciudad para llorarle a alguien quien hizo mucho por el país, aunque debido a eso su visión de la realidad se vio afectada o si habría días soleados para esa familia a la cual al inicio tenía que investigar, pero ahora eran importantes para ella.

Es la primera vez que te veo llorar espero que Anya pueda detener ese dolor en tu corazón.

Anya pensó y cerro la ventana para sentarse a cenar con sus padres.